Un espectáculo inédito con la participación de las "baterías" (orquestas de percusión) de las trece principales escuelas de samba de Río de Janeiro reunió una multitud en la playa de Copacabana y sirvió como abrebocas para el carnaval de febrero próximo en esta ciudad brasileña.

El llamado "Encuentro del Samba", organizado por la municipalidad de Río de Janeiro para despedir a los turistas que abarrotaron la ciudad más emblemática de Brasil en su tradicional fiesta de año nuevo, atrajo no sólo a los visitantes sino a miles de cariocas ansiosos para ver un espectáculo nunca visto en esta ciudad.

Ello debido a que fue la primera vez que tocaron juntos todos los percusionistas de las escuelas de samba del llamado Grupo Especial, las principales protagonistas del carnaval carioca y que generalmente se presentan en dos días diferentes y cada una por separado.

Igualmente fue inédito el encuentro entre los sambistas y los 59 integrantes de la Orquesta Sinfónica de Petrobras, que demostraron que los instrumentos de la música clásica también pueden ser usados en un concierto con clásicos del samba.

El espectáculo comenzó hacia las 19.00 hora local (21.00 GMT) de este sábado, cuando los percusionistas, divididos en dos grupos, comenzaron a recorrer desde puntos diferentes la avenida que bordea Copacabana, la playa más famosa de Brasil.

Con cerca de 80 percusionistas por cada escuela, el "Encuentro del Samba" reunió a cerca de mil músicos en Copacabana, así como a parejas de bailarines, mulatas con sus tradicionales atuendos, portabanderas y otros destaques de los grupos artísticos.

Los dos grupos desfilaron por varias calles interpretando marchinhas y sambas clásicos y arrastrando multitudes, hasta que se encontraron frente a la tarima que sirvió de palco principal para el Reveillon, como es conocida la tradicional fiesta de fin de año en Río de Janeiro y que el pasado domingo reunió a 2,4 millones de personas.

Enseguida invadieron la playa para juntarse a los músicos de la Orquesta Sinfónica en la tarima y acompañar, juntos, los conciertos ofrecidos por populares cantantes de samba como Alcione, Diogo Nogueira y Martinho da Vila.

Todo el espectáculo fue transmitido simultáneamente por 22 torres de cajas de amplificación distribuidas a lo largo de Copacabana para que los asistentes pudiesen disfrutarlo desde cualquier lugar de la playa.

Pese a que las autoridades no habían calculado el número de asistentes al espectáculo, la previsión de los organizadores era reunir a cerca de medio millón de personas.

Aunque el espectáculo fue organizado por la alcaldía como marco para ponerle fin a las festividades del Reveillon, también sirvió como apertura no oficial del carnaval, ya que faltan tan sólo cinco semanas para el comienzo de la mayor fiesta de Brasil.

La municipalidad espera que el carnaval supere en número los 707.000 turistas (93.000 extranjeros) que inundaron Río de Janeiro en la fiesta de Reveillon, que coparon el 98 % de la capacidad hotelera de la ciudad y que dejaron durante su estadía 1.820 millones de reales (unos 551,5 millones de dólares).

EFE